La seguridad de datos se ha convertido en una preocupación apremiante ya que las pérdidas de información pueden ser devastadoras para empresas y usuarios. Según estudios recientes, se estima que el costo global de los ciberataques alcanzó los 6 billones de dólares para 2021. En este escenario, dos términos que a menudo se utilizan en el campo de la ciberseguridad son "pentesting” y "ethical hacking”, ambos dirigidos a evaluar la fortaleza de las defensas de una organización frente a amenazas cibernéticas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que son procedimientos distintos con limitaciones diferentes.
Pentesting: Evaluando la Resiliencia de la Ciberseguridad
El pentesting, o prueba de penetración, es una técnica de ciberseguridad que implica simular ataques controlados contra los sistemas y redes de una organización. Existen distintos tipos de pentesting:
- Black Box Testing (Pruebas de Caja Negra): En este enfoque, el pentester realiza la evaluación sin tener acceso previo a información interna sobre el sistema. Se simula un escenario donde el atacante no conoce detalles específicos sobre la red o aplicaciones objetivo, lo que refleja una situación realista de un ciberataque externo.
- White Box Testing (Pruebas de Caja Blanca): Aquí, el pentester tiene acceso completo a la información interna del sistema, incluido el código fuente, la arquitectura y la infraestructura. Esta visibilidad detallada permite una evaluación exhaustiva, centrándose en la identificación de vulnerabilidades específicas y la verificación de las prácticas de codificación segura.
- Gray Box Testing (Pruebas de Caja Gris): Esta modalidad combina elementos de las pruebas de caja negra y blanca. Los pentesters tienen cierto conocimiento del sistema, lo que les permite enfocarse en áreas críticas, pero sin acceder a detalles completos. Esto imita un ataque de un empleado interno malicioso o un atacante con cierto grado de conocimiento previo.
A grandes rasgos el objetivo del pentesting es identificar vulnerabilidades y puntos débiles antes de que los ciberdelincuentes los exploten. Aunque el pentesting es una herramienta valiosa para descubrir vulnerabilidades, solo puede detectar las debilidades que son conocidas y accesibles durante el período de prueba.
Ethical Hacking: Un Enfoque Proactivo para la Seguridad
El ethical hacking, o hacking ético, es un enfoque más amplio y proactivo para garantizar la seguridad cibernética. Los ethical hackers son profesionales capacitados que imitan las tácticas, técnicas y procedimientos utilizados por los ciberdelincuentes, pero con intenciones legítimas y autorizadas. Los distintos tipos de Ethical Hacking incluyen:
- Red Team Testing: también conocido como equipo de ataque, simula un ataque realista y complejo sobre la infraestructura de seguridad de una organización. Su objetivo es evaluar la capacidad de detección y respuesta de la empresa frente a un ataque cibernético sofisticado.
- Web Application Testing: se centra en evaluar la seguridad de aplicaciones web. Los ethical hackers identifican vulnerabilidades en la lógica de la aplicación, como inyecciones SQL, cross-site scripting (XSS) y autenticación insegura, que podrían ser explotadas por atacantes.
- Wireless Network Testing: se evalua la seguridad de las redes inalámbricas, como Wi-Fi.
- Social Engineering: Esta técnica se enfoca en la manipulación psicológica de personas para obtener información confidencial o acceso a sistemas. Los ethical hackers utilizan tácticas como el phishing, ingeniería social y pretexting para evaluar la conciencia de seguridad y entrenar a los empleados sobre cómo evitar ser víctimas de ataques.
- Physical Security Testing: En este caso, los ethical hackers evalúan la seguridad física de una organización, como el acceso a edificios, salas de servidores y dispositivos. Pueden intentar ingresar físicamente a lugares restringidos para evaluar la eficacia de las medidas de seguridad implementadas.
A diferencia del pentesting, el ethical hacking puede descubrir vulnerabilidades no conocidason y a menudo se implementan técnicas más avanzadas para poner a prueba las defensas de una organización; esto aumenta su efectividad para proteger contra ataques futuros.
Ambos enfoques son esenciales en la ciberseguridad moderna. El pentesting brinda una visión clara de las vulnerabilidades conocidas en el sistema, lo que permite que se aborden de manera específica. Por otro lado, el ethical hacking va más allá y busca vulnerabilidades desconocidas, anticipándose a futuros ataques y fortaleciendo las defensas.
En Inova Solutions ofrecemos tanto servicios de pentesting como de ethical hacking para ayudar a las empresas a evaluar su postura de seguridad y protegerse contra posibles amenazas. Nuestro equipo de expertos en ciberseguridad está capacitado para identificar y abordar debilidades en los sistemas, asegurando que las organizaciones estén preparadas para enfrentar los desafíos del entorno digital en constante evolución.